El visagismo se refiere al arte de embellecer y transformar el rostro mediante cosméticos, tintes, cortes de cabello, técnicas de belleza para potenciar lo mejor que tiene cada persona con el fin de alinear su imagen con su personalidad y esencia.
La palabra Visagismo es un término derivado de la palabra francesa visage , que significa «rostro». El término fue acuñado en 1936 por el gran peluquero y maquillador Fernand Aubry (1907-1976).
¿Para qué sirve el visagismo?
El visagismo defiende la idea de que no basta con aplicar técnicas de embellecimiento al azar a una persona. Sino que estas técnicas se aplican estratégicamente, con propósito.
Para que haya una alineación entre quién es la persona en esencia, personalidad y el mensaje que está comunicando con su imagen.
Es decir, el visagismo se opone a la estandarización de las técnicas de belleza e invita al profesional de la belleza a una relación más empática, interesada y profunda con su cliente, ya que para que haya una aplicación asertiva de las técnicas es necesario que este primero sabe quién es la persona y qué mensaje quiere comunicar a través de su imagen.
¿Cuál es la importancia del visagismo para el profesional de la belleza?
Para que un profesional de la belleza pueda realizar un trabajo en armonía, para que el cliente se sienta valorado en su individualidad, es necesario conocer el visagismo y el lenguaje visual que rige la estética y la forma en que interpretamos lo que vemos.
A través del Visagismo es posible ofrecer un servicio totalmente personalizado para cada cliente y así no solo ser un profesional que aplica técnicas, sino también un socio que ayudará a este cliente a alinear su imagen con su personalidad, marca personal, meta personal o profesional, en resumen. Se trata de utilizar la imagen como una marca fuerte que podrá expresar quién es la persona incluso antes de cualquier presentación.
¿Cuál es la importancia del visagismo en la preparación del maquillaje?
Consultoría
Hay dos sesgos en el visagismo. Una es la consultoría , que es donde se hace un diagnóstico de lo que está expresando la imagen de la persona y si esa imagen está en consonancia con su intención, quién es realmente y qué pretende expresar con su imagen. A partir de ahí, se traza un plan de lo que se puede hacer en cuanto a estética: maquillaje, corte y color de cabello, colores, formas, todo lo que rige el lenguaje visual para que esta imagen exprese realmente lo que la persona quiere / necesita.
Armonización
El otro sesgo es la parte de armonizar las proporciones faciales para crear una imagen más bella, lo cual es muy importante para que la persona se sienta segura y satisfecha. Esto se hace aplicando líneas, formas, luces y sombras, colores, etc., para crear una imagen más atractiva y hermosa.
Cabe mencionar que solo esta armonización de forma aislada, sin tener en cuenta quién está detrás de la imagen , puede ocasionar serios problemas a la persona, ya que puede no reconocerse o identificarse con la imagen creada, por hermosa que sea.
¿Por qué deberíamos estudiar los temperamentos en el campo de la estética?
El temperamento es una forma muy antigua de clasificar los tipos de personalidad, fue propuesta por el filósofo y médico Hipócrates hace más de 5.000 años, pero sigue siendo útil en la actualidad.
Los temperamentos (Sanguino, Melancólico, Flemático y Colérico) no se manifiestan de forma aislada en nosotros, de alguna manera puede haber más de un temperamento, a menudo 02, 03, sin embargo uno siempre será predominante, más notorio.
La idea de estudiar temperamentos es tener una base de comprensión psicológica en la que ayude a comprender los patrones de pensamiento y comportamiento de las personas, lo que se beneficiará mucho a la hora de alinear la imagen con la personalidad.
Cada temperamento tiene sus características individuales, muchas veces la persona quiere resaltar algunas de ellas con un propósito personal o profesional, y para eso se utilizan colores, formas, líneas para resaltar estas características, y en otros casos la intención es contraria, uno. busca atenuar algo de ese temperamento, por lo que se utilizan elementos que comunican lo contrario, en definitiva.
Los temperamentos no son para enyesar, gravar o etiquetar a las personas, sino para tener un norte y una base de lo que podemos hacer para entregar una imagen más asertiva y alineada con quién es la persona, su momento de vida y su intención.
Espero que este post os haya servido de ayuda para entender un poco más sobre el universo del Visagismo, el tema es amplio, y traeré más artículos al respecto aquí.
Por ahora, cuéntame en los comentarios cuál es tu mayor pregunta sobre el visagismo y si este contenido te ayudó.
Abrazo,
Raphael Oliver
